DOLOR EN EL MUNDO: Falleció a los 88 años el Papa FRANCISCO

ACTUALIDAD21/04/2025 Por Late
El primer Papa argentino falleció a los 88 años en Roma tras sufrir una afección respiratoria. Será velado y sepultado en la Santa Sede, donde ya se decretaron siete días de duelo. Su legado espiritual, sus frases emblemáticas y su entrega incondicional a los más humildes lo convirtieron en un símbolo de fe viva.
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A las 2:35 de la madrugada, hora de Argentina, el mundo se estremeció con la noticia: murió el Papa Francisco, el pontífice del fin del mundo, como él mismo se definió, pero que supo llegar al centro del alma de millones. A los 88 años, tras una larga lucha contra una afección respiratoria, Jorge Mario Bergoglio partió en paz, en Roma, rodeado del silencio reverente que sólo los grandes pastores despiertan.

La Santa Sede confirmó que será velado en el Vaticano y sepultado en los próximos días, mientras se decretaron siete días de duelo oficial. Pero más allá de los ritos protocolares, su muerte marca el fin de una era donde el mensaje de Jesús volvió a sonar en las periferias, en las cárceles, en las villas, en los márgenes.

Francisco no fue sólo un Papa; fue un testigo de la ternura de Dios. Desde su histórica aparición en el balcón de San Pedro hasta su última bendición este domingo de Pascua, donde se ofreció al público como "el siervo del pueblo de Dios", vivió cada día con la certeza de que su fe era acción, compasión y verdad.

Sus palabras quedarán grabadas para siempre en la memoria colectiva: "Hagan lío", invitando a la juventud a revolucionar con amor y justicia, y "Quiero una Iglesia pobre para los pobres", una síntesis de su pontificado. Con gestos simples y potentes, despojado de lujos, Bergoglio devolvió humanidad al Vaticano y espiritualidad a una Iglesia que a veces había olvidado su raíz evangélica.

Hoy, los fieles lloran a su pastor, pero también lo celebran como quien vivió su Pascua, pasando a la vida eterna con la paz de quien caminó con Jesús, llevó su cruz y nunca dejó de mirar a los ojos al más pequeño. Su legado no será sólo teológico ni institucional: será profundamente humano y profundamente cristiano.

Francisco ya está en la historia. Pero sobre todo, está en el corazón de los que creen.

Por Osorio Víctor

Especial para Late FM y MLB Productora

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