Apagón masivo en Europa: investigan un posible ciberataque

Un apagón de gran magnitud afectó este lunes a amplias zonas del sur de Europa, con epicentro en España, Portugal, Italia y el sur de Francia. El corte eléctrico impactó en el transporte público, la señalización vial, los sistemas de comunicación por wifi y, en varios casos, los servicios de emergencia sanitaria.
En España, el aeropuerto internacional de Barajas tuvo que detener sus operaciones durante varias horas, provocando la cancelación de decenas de vuelos y un colapso generalizado en sus terminales. En tanto, hospitales en Madrid, Lisboa y Nápoles reportaron interrupciones en la red de suministros, aunque con funcionamiento de generadores de respaldo en áreas críticas como terapia intensiva.
Según cifras preliminares, se estima que más de 25 millones de personas fueron afectadas directa o indirectamente, y entre las principales compañías impactadas figuran Endesa, Iberdrola, Telefónica, Renfe y Metro de Madrid en el sector público y privado.
Desde el Gobierno español, el presidente Pedro Sánchez confirmó que "no se descarta la hipótesis de un ciberataque coordinado", y ordenó una investigación inmediata a cargo del Centro Criptológico Nacional. Sánchez también anunció que "todas las agencias de seguridad e inteligencia se encuentran en alerta máxima" y que habrá una actualización oficial en las próximas horas.
Mientras tanto, la agenda institucional también se vio alterada: la reunión prevista entre el Rey Felipe VI y su par de Chipre en Madrid fue suspendida hasta nuevo aviso, en un gesto de prudencia frente al panorama de incertidumbre.
Por su parte, fuentes del Consejo Europeo señalaron que "no existen, de momento, indicios claros de una intrusión extranjera en los sistemas eléctricos", aunque advirtieron que "se mantienen todas las opciones abiertas" y reforzaron los protocolos de ciberseguridad en infraestructuras críticas.
A medida que avanza la recuperación del servicio eléctrico en algunas zonas, la prioridad de las autoridades es restablecer el orden en los transportes y garantizar el suministro en sectores sensibles como la salud. Sin embargo, la falta de una explicación definitiva sigue generando preocupación y alimentando las versiones sobre un posible ataque intencional.